En pleno período de retorno a la normalidad, muchos esfuerzos van destinados a retomar la actividad tal y como era antes de la pandemia. En este sentido, debemos darle la adecuada importancia al factor de la climatización durante la COVID-19.
Las tecnologías del frío tienen un papel de enorme importancia en el momento de construir entornos seguros. En este sentido, la refrigeración evaporativa ha sido considerada como una actividad esencial desde el primer momento.
La climatización durante la COVID-19 ha motivado que todos los profesionales involucrados trabajen a fondo para alcanzar los niveles óptimos de refrigeración y calefacción. Todo ello sin descuidar que los espacios climatizados sean completamente seguros, manteniendo una óptima calidad del aire interior para minimizar los contagios vía aérea.
Aminorar probabilidades de contagio
Al referirnos a la climatización durante la COVID-19, existen ciertos sectores que cuentan con necesidades especiales. Industrias como la alimentaria tienen la obligación de analizar los ambientes de temperatura, humedad y renovación del aire desde hace años. De esta manera consiguen crear un ambiente de conservación idóneo para la materia prima y eliminar el riesgo de contaminación de la misma.
Se trata de lugares que requieren de bajas temperaturas tanto en las áreas de procesamiento como de almacenamiento, y que podrían representar focos de contagio por coronavirus.
En este sentido, la climatización durante la COVID-19 es primordial para aminorar las probabilidades de contagio por vía aérea. Especialmente al tratarse de lugares de trabajo con escasa ventilación y elevada concentración de personas.
Optimizar las instalaciones de climatización durante la COVID-19
La climatización durante la COVID-19 se enfrenta al gran reto de proteger el ambiente, y de ahí el impulso del desarrollo tecnológico en este sector. La adaptación permanente es un requerimiento que debe ser cubierto a la perfección mediante el constante seguimiento de los parámetros de control.
Optimizar las instalaciones de refrigeración evaporativa no solo en lo relacionado con la eficiencia energética, sino en la operatividad y la seguridad de los usuarios es un aspecto inaplazable en este momento.
Reorientación de actividades
Este es el marco en el que los especialistas, instaladores y empresas del sector del frío han tenido que trabajar intensamente durante los últimos meses. Enfrentándose a una situación que parecía ser hipotética y que se convirtió en una preocupante realidad.
De ahí la gran importancia de asegurar el correcto funcionamiento de todos los equipos en los entornos. Especialmente aquellos que revisten mayores posibilidades de contagio como centros hospitalarios, espacios comerciales o la industria de los alimentos.
Por ello, a partir del agua, la refrigeración evaporativa se convierte en una solución contundente en el desarrollo sostenible. Al utilizar condensadores y torres de refrigeración, contribuye notablemente al ahorro energético, la disminución de costes económicos y reduce su impacto en el cambio climático.
Y, desde luego, es una nueva realidad que exige la total reorientación de las actividades de las organizaciones. Pues ahora más que nunca debemos dar absoluta prioridad a la formación y preparación de todos sus expertos y profesionales para concentrarse en proporcionar un excelente servicio remoto a los clientes.
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