caldera de hidrógeno

La contaminación es un problema y un reflejo de esto es el cambio climático. Parte de esa polución viene de las calderas que se usan para calentar espacios y obtener agua caliente. Por eso, hace poco se ha presentado una alternativa: la caldera de hidrógeno.

Se trata de una buena solución a la hora de calentar grandes espacios como restaurantes, hoteles, oficinas, empresas, etc., que además pueden obtener beneficios al no contaminar.

Qué es una caldera de hidrógeno

A diferencia de las calderas de gas natural o de gasoil, que queman estos combustibles fósiles, las calderas de hidrógeno generan el calor a través de la combustión de este gas.

Ahora mismo no hay redes de suministro de hidrógeno ni camiones que lo transporten, por lo que es la propia caldera la que produce el hidrógeno que necesita. Esto lo hace a través de la electrólisis, una reacción química muy conocida.

Se aplica electricidad al agua de la caldera, de manera que el oxígeno y el hidrógeno se separan. Se obtienen así los dos gases, pudiéndose usar el hidrógeno como combustible, que es lo que se hace en las calderas. En estos momentos la calefacción de hidrógeno es algo novedoso, pero en mh INDUSTRIAS ya estamos preparados para instalarlas y mantenerlas.

Beneficios de la caldera de hidrógeno

Cada vez son más los clientes que nos preguntan por alternativas a las calderas de gas y una de las mejores es la de hidrógeno, pues presenta muchos beneficios.

Eficiencia energética

Las calderas de hidrógeno son muy eficientes, ofreciendo a las empresas un buen retorno de la inversión que hacen a la hora de instalarlas.

Como mejor se aprovecha es mediante la combinación con las energías renovables. Los clientes profesionales suelen tener tejados grandes, por lo que pueden colocar placas solares que den a la caldera de hidrógeno la energía necesaria para funcionar.

Sostenibilidad y reducción de emisiones

No hay calderas más sostenibles que las de hidrógeno. Su impacto ambiental es casi inexistente, pues no emiten gases de efecto invernadero, de hecho, lo único que aportan a la atmósfera es vapor de agua. Es cierto que gastan electricidad, pero se puede contratar energía procedente de fuentes renovables o producir la mayor parte de ella en la propia empresa a través de placas fotovoltaicas.

Se mejora la huella ambiental

Tanto en organismos públicos como en los negocios se persigue reducir la huella ambiental, y una de las mejores formas de hacerlo es con este tipo de caldera, que permite a las empresas posicionarse como líderes en la adopción de tecnologías verdes.

Eso puede suponer muchos beneficios, tanto fiscales como publicitarios, y de una mejor percepción por parte de los clientes, lo que al final se traduce en ventas.

Ya hay una alternativa a la caldera de gas y es la caldera de hidrógeno. No emiten más que vapor de agua a la atmósfera y son muy eficientes, por lo que en mh INDUSTRIAS ya hemos comenzado a instalarlas a los clientes más preocupados por el medioambiente.

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