Cuando los sistemas de refrigeración HVAC cuentan con un mantenimiento y una instalación adecuada logran mejorar notablemente la calidad del aire interior. Además, son capaces de proporcionar unos elevados niveles de confort a sus usuarios.

No obstante, cuando presentan algún fallo el efecto puede ser contrario. Es decir, pueden afectar el aire al expedir alérgenos, bacterias, polvo u otras sustancias negativas para el organismo. También tienden a enfriar de forma excesiva, así como provocar resequedad o exceso de humedad en el ambiente.

Indicios de problemas en sistemas de refrigeración HVAC

Conoce las señales de un sistema de refrigeración hvac que no funciona correctamenteCuando los sistemas de refrigeración HVAC presentan alguna avería, tienden a manifestarse a través de una serie de señales o indicios como:

Exceso de humedad

Algunas veces la unidad del sistema se sobredimensiona, provocando que enfríe el lugar con rapidez, pero no logre eliminar la humedad en el ambiente. Por tanto, esta última puede aumentar por encima de los niveles recomendados afectando al confort y la salud de los ocupantes.

Alteraciones fuertes en la temperatura

Cuando se utiliza un aire acondicionado o de calefacción de mayor potencia de la necesaria, tiende a provocar cambios fuertes en la temperatura ambiental, disparando el consumo energético y generando malestar en los usuarios.

Incremento de la velocidad

La velocidad con la que sale el aire de los sistemas de refrigeración HVAC hace que éste produzca una sensación térmica específica y controlen la humedad. Sin embargo, cuando tienen alguna avería pueden sufrir un incremento en dicha velocidad, creando un ambiente muy frío en un periodo corto tiempo, por lo que tiende a incomodar.

Esto ocurre cuando el equipo está sobredimensionado o existe alta presión en el conducto del aire y trae de igual forma un consumo energético excesivo por parte del equipo.

Emanación de olores desagradables

En los casos en que la ventilación del aire acondicionado o calefactor emana olores desagradables, la calidad del aire se reduce mucho. Esto puede deberse a que en los conductos se haya acumulado humedad y haya crecido moho en su interior.

Si el olor proviene del exterior del equipo probablemente existan fugas en los conductos o las conexiones entre ellos y el aparato sean deficientes.

Cuando el olor viene de otras zonas puede ser que los sistemas de ventilación no suministren aire fresco de forma efectiva por problemas de equilibrio entre la extracción y los ventiladores de inyección.

Cualquiera de estas tres situaciones exige la solicitud de un servicio técnico especializado para subsanar la avería.

Todas estas situaciones traen como resultado problemas de salud a las personas que habitan en el espacio, entre los más comunes se encuentran los dolores de cabeza, alergias temporales y otras condiciones producidas por las bacterias, el moho, la circulación de aire contaminado, así como las variaciones repentinas en los niveles de temperatura del ambiente.

Por tanto, lo más recomendable es solicitar una inspección y mantenimiento del equipo antes de la llegada del verano. De este modo, será posible contar con un equipo eficiente cuando aumenten las temperaturas.

Si tiene alguna duda al respecto del funcionamiento o cuidado de su sistema de refrigeración HVAC no dude en ponerse en contacto con nosotros.

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